3° de Cuaresma. Morado.
(San Patricio, obispo).
Os 14, 2-10; Sal 80, 6c-11ab. 14. 17.
Evangelio según San Marcos 12, 28b-34
Un escriba se acercó y le preguntó: «¿Cuál es el primero de los mandamientos?». Jesús respondió: «El primero es: Escucha, Israel: el Señor nuestro Dios es el único Señor; y tú amarás al Señor, tu Dios, con todo tu corazón y con toda tu alma, con todo tu espíritu y con todas tus fuerzas. El segundo es: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. No hay otro mandamiento más grande que estos». El escriba le dijo: «Muy bien, Maestro, tienes razón al decir que hay un solo Dios y no hay otro más que él, y que amarlo con todo el corazón, con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo, vale más que todos los holocaustos y todos los sacrificios». Jesús, al ver que había respondido tan acertadamente, le dijo: «Tú no estás lejos del Reino de Dios». Y nadie se atrevió a hacerle más preguntas.
40 acciones que transformarán tu vida en esta cuaresma
Ayune del ruido. Existen muchas personas que temen el silencio y la soledad, lo que les provoca confusión y dificultades al momento de elegir con quiénes relacionarse. Sin embargo, el silencio es fundamental para poder escuchar lo que se encuentra en nuestro interior. En ocasiones, por miedo a lo que podemos descubrir, nos refugiamos en el ruido, sin darnos cuenta de que estamos huyendo de nosotros mismos. Todo lo que necesitamos para transformar nuestras vidas comienza con el silencio. Cuando aprendemos a estar cómodos en nuestra propia compañía, podemos disfrutar aún más de la compañía de otras personas. Hoy, nos proponemos ayunar de sonidos. Apagaremos la radio, la televisión y la música del teléfono celular para experimentar el poder del silencio.
Javier Rojas, SJ.
